Hoy os mostramos fotos de boda en el club de tiro de Madrid. Pero no de una boda cualquiera, de la boda de Alexandra y Raúl, que son más que nunca, el príncipe y la princesa de todo un cuento de hadas. Comenzamos el día en casa del novio, donde se rebosaba de orgullo por el novio… ¡No hay más que ver las caras de los padres! La madrina que se terminaba de arreglar junto a su hijo sabía más que nadie lo importante que era ese día.
Todas las novias cuando se casan son un poco princesas. Lo sabes porque las niñas las miran como si su tía la de siempre, se hubiera transformado de repente en Elsa de Frozen. El caso es que Alexandra se convirtió en princesa durante todo el día de su boda, incluso antes de que se hubiera puesto el vestido. Estaba tan guapa con su vestido y sus accesorios color vino, iguales a los del novio, que cualquiera se hubiera parado para mirarla.
La ceremonia fue de lo más emocionante, no sólo por lo importante del momento en sí, sino porque estaba amenizada por unos gaiteros que llenaron el momento de música y celebración. Después tuvo lugar el banquete, en el Club de Tiro de Madrid. Podíamos ver por todos sus rincones detalles, ya fueran de los novios o del propio recinto. Por ejemplo, los novios tuvieron la original idea de hacer el sitting de los invitados con diferentes paradas de lugares que habían tenido importancia en su relación, y además, llegaron con una Volkswagen hippie de lo más chula.
Las fotos de pareja las hicimos en los alrededores del Club de Tiro, al atardecer, lo que dio lugar a un montón de románticas instantáneas… ¡De las que sólo os dejamos unas pocas! Para despedirnos, las típicas fotos de Photocall, que siempre triunfan porque sacan lo más divertido de los invitados después de la cena.
Les deseamos a esta pareja una vida entera de felicidad, y les agradecemos de corazón que nos hayan dejado participar en una boda tan original como esta.